Inspiración y concepto
Jean Paul Gaultier presenta esta versión intensa y seductora de Le Beau, concebida como un perfume tan “perfectamente desnudo” que no necesita vestimenta. En su Jardín del Edén olfativo, la naturaleza viste al frasco—un torso masculino lacado en negro y verde—con una simple hoja de parra dorada. Es una fragancia que invita a sucumbir al deseo, permitiendo que todos los pecados sean indulgidos.
Notas olfativas
Notas de salida: un frescor vibrante que combina piña, jengibre, ciprés y bergamota, o bien un acorde inicial de madera de coco, según la versión.
Notas de corazón: un espacio cálido y exótico dominado por coco y matices amaderados, además de la voluptuosa haba tonka, que aporta cremosidad y profundidad
Notas de fondo: una estela adictiva y sensual basada en sándalo, ámbar, ámbar gris y haba tonka, que sella con una persistencia memorable.
Sensaciones y carácter
Es una fragancia que define la masculinidad contemporánea con una estela amaderada y ámbar intensamente adictiva. El carácter del aroma es poderoso, seguro y desinhibido, proyectando un aura de virilidad refinada y seducción audaz.
Duración y versatilidad
Este eau de parfum intenso está diseñado para ofrecer una larga duración y una proyección notable, ideal para momentos donde se busca dejar una impresión memorable, tanto en la piel como en la ropa.
Presentación
El frasco de 125 ml luce el icónico torso masculino de Gaultier, lacado en negro y verde, y acompañado por una hoja de parra dorada que simboliza la tentación. Es una pieza visual tan poderosa como la fragancia que contiene
